La Habana

(Continuación...)

PERSONAJES:

Indiscutiblemente habremos de cambiarnos "el chip" mental, dado que al contemplar ciertas situaciones, pueden muy bien llevarnos a un total engaño, y probablemente la consiguiente "metedura de pata".

 

Pulse para ampliar imagen

Joven liando un pitillo

(Pulse para obtener imagen completa)

He aquí a un joven cubano liando un pitillo de tabaco, y repito "de tabaco". La droga ilegal está duramente perseguida. Nadie piense que puede encontrar "chocolate" o "nieve" a la vuelta de la esquina como suele ocurrir hasta en el más remoto pueblo de España. Usted limítese a consumir tabaco y alcohol. Del resto, olvídese. Y no se le ocurra pasar en su equipaje, "costo" para uso personal. Pudiera muy bien no salir de la isla. (sería lamentable el tener que ser el protagonista de "Expreso de Medianoche" parte II).

 

Y, ¿qué decir de la situación laboral?, ¿hay paro?, ¿seguro de desempleo?, ¿huelgas?, ¿plataformas reivindicativas?, etc. Pues nada, de nada, ya que los parámetros sociales del Régimen, no son equiparables a los nuestros y menos aún a los del "enemigo", (EE.UU.). No hay despido, tampoco competencia, nada de incentiva laboral y superación profesional. Hágase lo que que haga, el puesto de trabajo lo tienen asegurado. Las consecuencias de esa falta de competitividad, el empleo estable y seguro, la ausencia total del miedo al despido, trae como efecto el que, quien quiere trabajar duro en su trabajo lo hace, y quien no, se lo toma con una cierta irresponsabilidad. Tal extremo se puede constatar en la siguiente imagen en donde vemos a unos obreros en "pleno trabajo". (Afirmo, no era la hora del almuerzo).

Pulse para ampliar imagen

Obreros en horas laborales

(Pulse para obtener imagen completa)

Lo anterior no significa que el cubano "per se", sea irresponsable, indolente y que no tenga estímulos. Tuve el acierto de alquilar coche y chofer. Norberto, que así se llamaba, venía cada día, a la hora que se le citara a La Habana, haciendo un recorrido de 30 Klms. (en Dios sabe qué transporte), con tal de llevar unos dólares a su mujer y tres hijos. Era un güajiro auténtico, responsable, fiel, honrado y digno del mayor elogio. Este es su retrato:

Pulse para ampliar imagen

Norberto, mi chofer

(Pulse para obtener imagen completa)


Pulse la flecha, para seguir la historiaPulse para ampliar imagen