Citas

 


Reíd, y el mundo reirá con vosotros; llorad y llorareis solos.

(Ella Wheeler Wilcox)


No nos hace falta valor para emprender ciertas cosas porque sean difíciles, sino que son difíciles porque nos falta valor para emprenderlas.

(Séneca)


Las convicciones son más peligrosos enemigos de la verdad que las mentiras.

(Nietzsche)


¿Porqué nos alegramos en las bodas y lloramos en los funerales? Porque no somos la persona involucrada.

(Mark Twain)


Siempre que enseñes, enseña a la vez a dudar de lo que enseñas.

(José Ortega y Gasset)


La ley es una telaraña que detiene a las moscas y deja pasar a los pájaros.

(Anacarsis)


No hay castos; solamente hay enfermos, hipócritas, maniacos y locos.

(Anatole France)


Lo que opinas de ti mismo es mucho más pertinente que lo que los demás opinan de ti.

(Séneca)


Un buen escritor expresa grandes cosas con pequeñas palabras; a la inversa del mal escritor, que dice cosas insignificantes con palabras grandiosas.

(Ernesto Sabato)


Muy frecuentemente las lágrimas son la última sonrisa del amor.

(Stendahal)


Hay solamente una cosa en el mundo peor que hablen de ti, y es que no hablen de ti.

(Oscar Fingal O`Flahertie Wills Wilde)


La única cosa que sé es saber que nada sé; y esto cabalmente me distingue de los demás filósofos, que creen saberlo todo.

(Sócrates)


El hombre inteligente no es el que tiene muchas ideas, sino el que sabe sacar provecho de las pocas que tiene.

(Anónimo)


Si has tomado el camino equivocado, no sientas lastima por ti mismo; ¡da la vuelta!

(Anónimo)


Quedarse en lo conocido por miedo a lo desconocido, equivale a mantenerse con vida pero no vivir.

(Anónimo)


Es peligroso tener razón cuando el gobierno está equivocado.

(Voltaire)


No entiendes realmente algo a menos que seas capaz de explicárselo a tu abuela.

(Albert Einstein)


Sólo comprendemos aquellas preguntas que podemos responder.

(Nietzsche)


La realidad es una alucinación causada por la falta de alcohol.

(Anónimo)


Cuanto más conozco a la gente más quiero a mi perro.

(Diógenes Learcio)


El mejor truco del diablo es que la gente haga cola para entrar en el infierno voluntariamente.
(JD McGregor)

Cuando gobiernan los insensatos, ser sensato es una insensatez.

(Voltaire)


¿Y si antes de empezar lo que hay que hacer, empezamos por lo que tendríamos que haber hecho? -Felipe.

(QUINO, Joaquín Salvador Lavado Quino
Dibujante humorístico argentino)


¿Cómo sabéis si la Tierra no es el infierno de otro planeta?.

(Aldous Huxley)


Siempre hay que elegir el menor entre dos males.

(Tomás de KEMPIS)


No hay viento favorable para el que no sabe dónde va.

(Séneca)


Buscando el bien de nuestros semejantes, encontramos el nuestro.

(Platón)


Cuando alguien te lame las suelas de los zapatos, colócale el pie encima antes de que comience a morderte.

(Paul Valéry)


El que se ruboriza ya es culpable; la verdadera inocencia no siente vergüenza por nada.

(Rousseau)


¿Qué es en el fondo actuar, sino mentir? ¿Y qué es actuar bien, sino mentir convenciendo?

(Sir Laurence Oliver)


La violencia es el miedo a los ideales de los demás.
(Gandhi)


Para que triunfe el mal, sólo es necesario que los buenos no hagan nada.

(Edmund Burke)


El ordenador nació para resolver problemas que antes no existían.

(Bill Gates)


La ventaja de ser inteligente es que así resulta más fácil pasar por tonto. Lo contrario es mucho más difícil.

(Kurt Tucholky)


Todos nacemos originales y morimos copias.

(Carl Gustav Jung)


Tener hijos no lo convierte a uno en padre, del mismo modo en que tener un piano no lo vuelve pianista.

(Michael Levine)


Si estás solo, serás todo tuyo, y si estás acompañado por una sola persona, serás medio tuyo.

(Leonardo da Vinci)


El que no pueda lo que quiera, que quiera lo que pueda.

(José Ortega y Gasset)


Si no tienes la libertad interior, ¿qué otra libertad esperas poder tener?

(Arturo Graf)


Una verdad sin interés puede ser eclipsada por una falsedad emocionante.

(Aldous Huxley)


Aprender sin pensar es inútil. Pensar sin aprender es peligroso.

(Confucio)


Hay que tener buena memoria después de haber mentido.

(Pierre Corneille)


No hagas de tu cuerpo la tumba de tu alma.

(Pitágoras de Samos)


Hay momentos en la vida cuyo recuerdo es suficiente para borrar años de sufrimiento.

(Voltaire)


Carpe Diem Memento Mori.

(Vive el momento. Recuerda que morirás.)


La experiencia no consiste en el número de cosas que se han visto, sino en el número de cosas que se han reflexionado.

(José María de Pereda)


Ecologismo es tratar de conservar lo que hay hoy por miedo a lo que podría haber.

(Martín Caparrós)


La peor derrota de una persona es cuando pierde su entusiasmo.

(Arnold, H.W.)


Sólo el que no ama está exento de dolor, pero quien a nadie ni a nada ama está muerto.

(Anónimo)


La riqueza consiste mucho más en el disfrute que en la posesión.

(Aristóteles)


La experiencia no consiste en lo que se ha vivido, sino en lo que se ha reflexionado.

(José María de Pereda)


Besos que vienen riendo, luego llorando se van, y en ellos se va la vida, que nunca más volverá.

(Miguel Unamuno)


Pensar contra la corriente del tiempo es heroico: decirlo una locura.

(Eugène Ionesco)


Amor y deseo son dos cosas diferentes; que no todo lo que se ama se desea, ni todo lo que se desea se ama.

(Miguel de Cervantes)


La vida es aquello que te va sucediendo mientras tu te empeñas en hacer otros planes.

(John Lennon)


Cuanto más cerca de la Iglesia, más lejos de Dios.

(Lancelot Andrewes)


La idiotez es una enfermedad extraordinaria, no es el enfermo el que sufre por ella, sino los demás.

(Voltaire)


La falla de nuestra época consiste en que sus hombres no quieren ser útiles sino importantes.

(Sir Winston Churchill)


La ley es una telaraña que detiene a las moscas y deja pasar a los pájaros.

(Anacarsis)


Es una lástima que la estupidez no duela.

(Anton Lavey)


No llego a comprender por qué, siendo los niños tan inteligentes, los adultos son tan tontos. Debe ser fruto de la educación.

(Alexandre Dumas (hijo)


En el mundo hay sólo dos maneras de triunfar: por la propia capacidad o por la imbecilidad ajena.

(Jean de La Bruyère)


Dos cosas son infinitas: el universo y la estupidez humana; y yo no estoy seguro sobre el universo.

(Albert Einstein)


El hombre es el único animal que come sin tener hambre, bebe sin tener sed y habla sin tener nada que decir.

(Mark Twain)


El banquero es un señor que nos presta el paraguas cuando hace sol y nos lo exige cuando empieza a llover.

(Mark Twain)


Es peligroso todo aquel que no tiene nada que perder.

(Johann Wolfgang von Goethe)


Si ya sabes lo que tienes que hacer y no lo haces entonces estás peor que antes.

(Confucio)


Prefiero molestar con la verdad que complacer con adulaciones.

(Séneca)


Es más fácil luchar por unos principios que vivir de acuerdo con ellos.

(Alfred Adler)


Cuando un hombre quiere matar a un tigre, lo llama deporte; cuando es el tigre quien quiere matarle a él, lo llama ferocidad.

(George Bernand Shaw)


Sólo se es poseedor de aquello de lo cual uno puede desprenderse; de lo contrario no se es poseedor, sino poseído.

(Anónimo)


Importa mucho más lo que tú piensas de ti mismo que lo que los otros opinen de ti.

(Séneca)


Como siempre: Lo urgente no deja tiempo para lo Importante. -Mafalda.

(Joaquín Salvador Lavado QUINO)


¡Triste época la nuestra! Es más fácil desintegrar un átomo que un prejuicio.!

(Albert Einstein)


Cuanto más conozco a la gente más quiero a mi perro.

(Diógenes)


Una persona con convicciones tiene tanta fuerza como 100.000 personas que no tienen nada más que intereses.

(Anders Behring Breivik)


Se necesitan dos años para aprender a hablar y sesenta para aprender a callar.

(Ernest Hemingway)


Dar ejemplo no es la principal manera de influir sobre los demás; es la única manera.

(Albert Einstein)


La riqueza consiste mucho más en el disfrute que en la posesión.

(Aristóteles)


Tener hijos no lo convierte a uno en padre, del mismo modo en que tener un piano no lo vuelve pianista.

(Michel Levine)


Si lloras por haber perdido el sol, las lágrimas no te dejarán ver las estrellas.

(Tagore)


A veces también el silencio es una opinión.

(Anónimo)


La teoría es asesinada tarde o temprano por la experiencia.

(Albert Eistein)


Yo no hablo de venganzas ni perdones, el olvido es la única venganza y el único perdón.

(Jorge Luís Borges)


Como pretendes que otro guarde tu secreto si tú mismo, al confiárselo, no los has sabido guardar.

(François de La Rochefoucauld)


Verdaderamente, el hombre es el rey de los animales, pues su brutalidad supera a la de éstos.

(Leonardo da Vinci)


El casarse es terminar una serie de pequeñas tonterías con una gran estupidez.

(Nietzsche)


El cuerpo humano es el carruaje; el yo, el hombre que lo conduce; el pensamiento son las riendas, y los sentimientos, los caballos.

(Platón)


El mundo entero se aparta cuando ve pasar a un hombre que sabe adónde va.

(Antoine de Saint-Exupéry)


Lo preocupante no es la perversidad de los malvados sino la indiferencia de los buenos.

(Matin Luther King)


La soberbia es tal vez una de las formas de expresión más refinadas que tiene la estupidez.

(Anónimo)


El futuro nos tortura y el pasado nos encadena. He ahí porque se nos escapa el presente.

(Gustave Flaubert)


Para saber algo, no basta con haberlo aprendido.

(Séneca)


Ser sincero no es decir todo lo que se piensa, sino no decir nunca lo contrario de lo que se piensa.

(André Maurois)


El infortunio pone a prueba a los amigos y descubre a los enemigos.

(Epícteto)


Una nación que gasta más dinero en armamento militar que en programas sociales se acerca a la muerte espiritual.

(Luther Martin King)


Nadie ofrece tanto como el que nada puede cumplir.

(Quevedo)


Entre toros no debiera haber cornadas.

(Anónimo)


Las locuras que más se lamentan en la vida de un hombre son las que no se cometieron cuando se tuvo la oportunidad.

(Helen Rowland)


Nadie que sea esclavo de su cuerpo es libre.

(Séneca)


La realidad tiene limites; la estupidez no.

(Napoleón Bonaparte)


Estudia el pasado si quieres pronosticar el futuro.

(Confucio)


Saber cuando uno dispone de lo suficiente es ser rico.

(Lao Tse)


Sin un corazón lleno de amor y sin unas manos generosas, es imposible curar a un hombre enfermo de su soledad.

(Teresa de Calcuta)


Los hombres aprenden mientras enseñan.

(Séneca)


Lo peor que hacen los malos es obligarnos a dudar de los buenos.

(Jacinto Benavente)


Si cierras la puerta a todos los errores, dejarás afuera a la verdad.

(Tagore)


Si dais la impresión de necesitar cualquier cosa no os darán nada; para hacer fortuna es preciso aparentar ser rico.

(Alexandre Dumas)


Exige mucho de ti mismo y espera poco de los demás. Así te ahorrarás disgustos.

(Confucio)


Si al franquear una montaña en la dirección de una estrella, el viajero se deja absorber demasiado por los problemas de la escalada, se arriesga a olvidar cual es la estrella que lo guía.

(Antoine de Sant-Exupéry)


Nadie pone más en evidencia su torpeza y mala crianza que el que empieza a hablar antes que su interlocutor haya concluido.

(Anónimo)


Sólo hay un bien causa y fundamento de la vida feliz: creer en uno mismo.

(Séneca)


No existe nada bueno ni malo; es el pensamiento humano el que lo hace aparecer todo así.

(William Shakespeare)


Siempre que enseñes, enseña a la vez a dudar de lo que enseñas.

(José Ortega y Gasset)


En el país de los ciegos el tuerto es el rey.

(Erasmo de Rotterdam)


La peor derrota de una persona es cuando pierde su entusiasmo.

(H.W. Arnold)


Los hijos se convierten para los padres, según la educación que reciban, en una recompensa o en un castigo.

(Petit-Senn, J.)


No hagas de tu cuerpo la tumba de tu alma.

(Pitágoras)


Tengo tres perros peligrosos: la ingratitud, la soberbia y la envidia. cuando muerden dejan una herida profunda.

(Martin Luther King)


No es pobre quien poco tiene sino el que desea más.

(Séneca)


Cuando llega el tiempo en que se podría, ha pasado en el que se pudo.

(Marie Von Ebner)


Más que avergonzarte de confesar tu ignorancia, avergüénzate de insistir en la necia discusión que la revela.

(Anónimo)


¿Quieres ser rico? Pues no te afanes en aumentar tus bienes, sino en disminuir tu codicia.

(Epicuro)


La multitud obedece más a la necesidad que a la razón, y a los castigos más que al honor.

(Aristóteles)


He descubierto que la mejor manera de dar consejos a los niños es averiguar primero que desean y en seguida aconsejarles que lo hagan.

(Harry S. Truman)


De todos los animales de la creación el hombre es el único que bebe sin tener sed, come sin tener hambre y habla sin tener nada que decir.

(John Steinbeck)


Mi nacimiento no me vincula a un único rincón. El mundo entero es mi patria.

(Séneca)


La primera virtud es frenar la lengua, y es casi un dios quien teniendo razón sabe callarse.

(Catón de Utica)


El que se deja llevar por el ímpetu del arrebato será siempre un juguete de sus pasiones y un esclavo del primero que sepa observarle.

(Wallace Stevens)


Lo que hacemos no es nunca comprendido, y siempre es acogido sólo por los elogios o por la crítica.

(Friedrich Nietzsche)


Teoría es cuando se sabe todo y nada funciona; praxis cuando todo funciona y nadie sabe por qué.

(Anónimo)


La esclavitud más denigrante es la de ser esclavo de uno mismo.

(Séneca)


Estar preparado es importante, saber esperar lo es aún más, pero aprovechar el momento adecuado es la clave de la vida.

(Arthur Schnitzer)


El miedo está siempre dispuesto a ver las cosas peores de lo que son.

(Tito Livio)


La peor decisión es la indecisión.

(Benjamin Franklin)


Si todo el año fuese fiesta, divertirse sería más aburrido que trabajar.

(William Shakespeare)


La prosperidad hace amistades, y la adversidad las prueba.

(Anónimo)


La diferencia entre un civil y un militar es que el primero siempre puede militarizarse, pero el segundo rara vez puede civilizarse.

(Georges Clemenceau)


El «etcétera» es el descanso de los sabios y la excusa de los ignorantes.

(Enrique Jardiel Poncela)


Apiadarse de la desdicha de los amigos está bien, pero socorrerlos está mejor.

(Voltaire)


Algunas personas son tan falsas que ya no son conscientes de que piensan justamente lo contrario de lo que dicen.

(Marcel Aymé)


Solamente hay un éxito: poder vivir la vida a tu gusto.

(Chistopher Morley)


La dictadura es el sistema de gobierno en el que lo que no está prohibido es obligatorio.

(Enrique Jardiel Poncela)


Experiencia es el nombre que damos a nuestras equivocaciones.

(Oscar Wilde)


No hacer el bien es un mal muy grande.

(Jean-Jacques Rousseau)


Lo que has de decir, antes de decirlo a otro, dítelo a ti mismo.

(Séneca)


Faltan palabras a la lengua para los sentimientos del alma.

(Fray Luis de León)


El ofendido muchas veces sabrá perdonar, pero el ofensor jamás perdona.

(John Dryden)


El origen del sufrimiento -decía Buda- es que tu quieras que la realidad sea de una manera, y es de otra. Y mientras te quedes queriendo que sea así y es al revés, te vas a quedar paralizado. Tienes que entender que en la vida no hay premios y castigos, hay experiencias de vida. Las cosas pasan, y si permaneces enojado es como tomarte un veneno esperando que le haga daño a otro. ¡Acepta y fluye!


Protegedme de la sabiduría que no llora, de la filosofía que no ríe y de la grandeza que no se inclina ante los niños.

(Jalil Gibran)


Los perros no molestan hasta que ladran y los necios hasta que hablan.

(George Barnand Show)


Los niños no tienen pasado ni futuro, por eso gozan del presente, cosa que rara vez nos ocurre a nosotros.
(Jean de La Bruyère)


Lo que se obtiene con violencia, solamente se puede mantener con violencia.

(Gandhi)


Hay quien cruza el bosque y sólo ve leña para el fuego.

(León Tolstoy)